Andalucía

El 28 de Febrero se celebra el día de Andalucía , una gran efeméride de gran importancia para el andaluz. Pero muy lamentablemente la gran mayoría celebrará este día con menos ímpetu que el día de los enamorados, obviando la grandeza que encierra el 28 de Febrero.

Hablar de Andalucía es hablar de historia , del legado que nos dejaron múltiples pueblos y culturas, y que esta sabia tierra hizo hacer suyo. Hablar de Andalucía es hablar del Guadalquivir, del sol y del olivar. Olivares que tanto podrían hablar de nuestra historia, porque ellos estaban ahí antes de que esta hermosa región tuviese nombre, ellos pacientes y silenciosos contemplaban como andaluces que aún no sabían que lo eran labraban las tierras y con su sudor sentaban las bases de lo que hoy es Andalucía.

Este día no debe suponer tampoco un motivo de nostalgia, sino un compromiso con nuestra tierra, conmemorando tan señalada fecha. Debemos enorgullecernos de las muchas metas alcanzadas en estos años de autonomía para aspirar a objetivos muchos más altos.

Si Blas Infante , “Padre de la Patria andaluza”, levantase la cabeza estaría muy orgulloso de su gente, por todo lo conseguido, pero no permitiría que destinasemos un sólo segundo de nuestro tiempo a la autocomplacencia por todo lo que hemos pasado, ni al triunfalismo por todo lo avanzado. Nos daría un fuerte empujón para que mirásemos hacia adelante ya que queda mucho camino por recorrer.

Andalucía ha dado un cambio radical en estos años de autonomía , pero hay que seguir trabajando y hacer nuestras aquellas palabras de Blas Infante: “ Mi nacionalismo, antes que andaluz, es humano. Creo que , por el nacimiento, la naturaleza señala a los soldados de la vida el lugar donde han de luchar por ella . Yo quiero trabajar por la Causa del espíritu en Andalucía porque en ella nací. Si en otra parte me encontrare , me esforzaría por esta Causa con igual fervor”.